POESÍA BACHILLERATO

SI NO RECUERDAS EL OLOR DEL AMOR

DANIEL MALLO

Si no recuerdas el olor del amor no estás vivo

Si cuando entras en el hogar que abandonó no hueles su perfume, tu corazón ya no late

Vivo no es aquel cuyo corazón late sino aquel que suspira con el olor del manjar compartido

Vivo no es aquel que se despierta sino aquel que cuando lo hace aún piensa en ella

Uno puede vivir sin ser amado pues en la soledad también hay poesía

Pero nadie puede vivir sin amar pues en amar se encuentra la esencia de la humanidad

Si no recuerdas con una sonrisa esa estupidez que hiciste para impresionar a la mujer querida

Si ves a un enamorado actuando como un enloquecido y le giras la mirada con crueldad

Si crees que el amor es cosa de jóvenes

Y no estás dispuesto a dejarlo todo por la promesa de un amor de eones

Si sonríes con superioridad al ver a la gente que ama antes de pensar

Y no recuerdas los momentos en los que viviste, en los que viviste de verdad

En los que te habrías enfrentado al fuego, al rayo, a la brutal tempestad

Por un beso de cariño de la persona a la que solías amar

Si has olvidado de verdad lo que es amar y tu corazón se ha cerrado

Para no dejar entrar nada y ya solo respondes a la racionalidad

Entonces, amigo mío, tú ya no estás vivo, pues hasta que exhales tu último suspiro

Vivirás pese a haber ya fallecido

Pues si no recuerdas el olor del amor

Si no ves en el arco iris el deseo

Si no tocas la pasión en el cálido limonero

Tú no estás vivo, estás más que muerto

Pues amar es vivir

Y vivir es más que tener un corazón al que oír latir

Así que ama, vuelve a amar como antaño

Porque cada lágrima derramada por amor es lágrima de vida

Así que ama, vuelve a amar

Y cuando recuerdes el olor del amor perdido no dejes nunca de recordar.

 

LA NADA VACÍA PARA GENTE VACÍA

JOAN ROBELLÓ

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Título:

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DADA NO significa nada,

DADA NO es pertenecer, es SER DADA,

SER DADA es SER YO, SeR uNo miSMo

DADA NO es un movimiento..

NO es pertenecer a un movimiento, con sus convencionalismos

DADA es ser DADA.

 

 

Pertenecer : es aceptar que eres igual que los otros..

es ser esclavo de una cultura o normas impuestas.

 

Yo no soy nada,

Yo no tengo cultura,

Yo no tengo ninguna lengua,

Yo no tengo nacionalidad

Yo no tengo nada…

solo soy mi forma ÚNICA de pensar

solo soy mi lenguaje y

mi nacionalidad es el mundo,

el mundo de mi cabeza, donde los ideales abundan.

 

POESÍA 3º/4º ESO

UN GATO EN GRANADA

DANIEL MOTA

En una calle de Granada iba maullando

este gatito simpático y atigrado,

que durante el mediodía andaba buscando

una sombra para protegerse del verano.

-¿Qué quiere el lindo gatito, acalorado?

Esto decía tan alegre el niño gitano,

cuando al triste gato leche le iba dando.

El felino ciertamente asustado,

acepta el plato algo desconfiado.

Y así el chiquillo se quedó jugando,

en el bonito barrio del Albaicín blanco,

con el gato que allí se había quedado,

por un poco de leche y algo de pescado.


POESÍA 1º/2º ESO

LOS PÁJAROS

LAIA SIRVENT

Si quieres que te expliquen

los pájaros al cantar

una pequeña historia

que hicieron al volar.

 

Espérate sentado

que no es fácil aguantar

porque muchos cuentos

te pueden narrar.

 

Una vez contaron

la de un pollito singular,

que surcaba el cielo

sobre el mar tropical.

 

Ellos dicen

que no es cansado pasear

inventando historias

sin parar de pensar.

Si quieres que te expliquen

los pájaros al cantar

una pequeña historia

que hicieron al volar

mientras el suave viento les acuna sin cesar.

 


PROSA 3º/4º ESO

QUERIDA ABUELITA

MIREIA DOMÍNGUEZ

Abuelita, te echo de menos. Las cosas han cambiado, todos notamos tu ausencia. El abuelo ya no habla de ti, nadie lo hace… Esta navidad, ha sido la más triste de todas. Tu sitio, lo hemos dejado intacto, hemos puesto una silla. El abuelo la ha mirado un par de veces, aun no acepta que te hayas ido. Àlex ha ido varias veces al baño, ha ido a llorar, se oía su llanto des de el comedor, yo también he querido hacerlo, pero no lo he hecho, he cumplido mi promesa ”Se fuerte mi niña, las princesas nunca lloran” me decías siempre, nunca olvidaré tus grandes ojos verdes mirándome mientras pronunciabas esas palabras. Mientras te escribo esta carta mis lágrimas caen sobre la hoja dejando borrosas algunas letras y rompiendo la promesa que te hice.

Ayer, cuando entré tuve ganas de llorar, eran demasiados recuerdos felices perdidos en el olvido. El abuelo me recibió con un beso en la frente, se veía la tristeza que aun siente por tu perdida reflejada en sus ojos azules. Hoy, no he dormido, me he pasado la noche en vela, llorando, sintiendo las gotas de agua resbalando por mi rostro.

Cuando acabe de escribir esta carta y todos hayan caido en un sueño profundo, la quemaré para que mis sentimientos mueran con ella. Querida abuelita, te quiero.

 

 

CARTA DE AMOR

RAQUEL PÉREZ

Amada Lola,

Te escribo desde lo más profundo de mi corazón para contarte cada uno de mis sentimientos de cuando dejé de estar aquí, a tu lado.

Cuando cierro los ojos, puedo verte a ti, a nuestra hija y a nuestras nietas rodeando la camilla donde balbuceaba cuando sufrí ese ictus cerebral, que dio por resultado un triste final.

Mientras la más piquiniña me volvía a enseñar las palabras, las letras, los animales… Podía ver en vuestros ojos lágrimas que temblaban, a punto de rodar por vuestras mejillas. Yo también lloraba, yo también lamentaba mi desgracia. No poder comunicarme, aún teniendo las palabras en la punta de la lengua. Horrible… Hubiera deseado poder secar esas lágrimas, explicaros que estaba bien… Cuando nadie estaba de visita, sólo estábamos tú y yo. Tratabas de parecer alegre, pero tus ojos enrojecidos mostraban que el aire “demasiado higiénico” estaba haciéndote daño. Casi siempre me dormía, pues, ¿qué podría hacer yo, encerrado las veinticuatro horas del día en una sala de hospital? Era entonces cuando mostrabas tus verdaderos sentimientos. Llorabas, tratando de no alzar la voz para que no me despertara, pero en mis sueños era capaz de oírte sollozar… Mis sueños, el único sitio dónde podía decirlo todo, sin decir nada. Podía comunicarme con todos, y todos me entendían. No oía lo que decíamos, pero nos entendíamos, era sencillo. Ojalá hubiera sido así también en la realidad… Íbamos haciendo, mi salud mejoraba y lograba salir, entonces era cuando más feliz me sentía. Pero esa felicidad era intermitente, pues al cabo de unos días volvían a encerrarme en esas blancas paredes por culpa de mis altibajos. Y así estuvimos “jugando” un tiempo, yendo de casa al hospital. Simplemente era una lenta y dolorosa tortura, sólo deseaba que todo acabara… Y a la vez lo rechazaba: el aferrarse a la vida es una característica tanto humana como animal.

No todo eran penas, también recuerdo aquél día que un enfermero sacó algo de su bolsillo y me preguntó por su nombre. Contesté decidido “gato”. Tanto tú como él empezasteis a reír, y me sentí un poco avergonzado. Se lo contaste a nuestra familia y rieron alegremente, finalmente acabó siendo una muletilla para todos. Siempre que pasaba por la habitación las mostraba y me preguntaba el nombre, hasta que dije “tijeras”.

Finalmente, llegó el día. Me sentí como en un sueño, no lograba abrir los ojos. Entré en estado vegetativo, según una de las voces que podía oír del exterior. No sé cuánto tiempo pasó, pero oí diversas conversaciones, algo difusas. “Tres días… Pero podríamos alargarlo un poco si seguimos manteniendo los…” “¡Quitadlos todos! No quiero que sufra más…” “¿Seguro?” “Por supuesto.”

Pasé algo de tiempo vagabundeando en un espacio en blanco. Cada vez oía menos sonidos. Sólo algunos llantos y máquinas de vez en cuando. Finalmente… Ya no oí nada. Supongo que entonces fue cuando morí.

En ese momento, lo que más lamenté fue no poderte ver, ser incapaz de abrazarte con los brazos que ya no tenía, no poder consolar a las niñas, saber que no volvería a ver la tierra dónde nací, ni toda esa gente que me había hecho crecer…

Por eso, Lolita mía, ya que no puedo estar a tu lado para ayudarte aún sabiendo que llevas una carga muy pesada sobre tu espalda, quiero que no llores por mí, que sigas yendo a Galicia con las niñas y que siempre mantengas tu bella sonrisa, que ha sido inmune al paso del tiempo. Y si alguna vez te sientes sola, recuerda que tienes a tus otros seres queridos que quieren ayudarte y quererte, y yo siempre estaré animándote hasta el día en que nos reencontremos.

Tuyo para siempre,

Julio.

 

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